Clara: He viajado por todo el mundo desde los dieciocho años desde que los sueños empezaron. En ellos, mis dos Compañeros me dan caza en un bosque ancestral y yo sé que, una vez logren atraparme, su pasión me consumirá hasta que no pueda pensar en nada que no sea el placer que ellos me provocan. Es un juego al que jugamos noche tras noche y que me vuelve loca de anhelo por esas dos figuras fantasmales que cada vez siento más cerca de mí. Mi Loba aúlla de necesidad cada vez que pienso en ellos, y mi búsqueda ya se ha alargado durante demasiados años. En cuanto mis pies tocan Green Valley, sé que por fin he llegado al lugar de mis sueños. Y que ellos no tardarán en encontrarme. Blake: Mi gemelo y yo hemos estado esperando a que nuestra Compañera venga a nosotros durante años, poco a poco siendo consumidos por los sueños que nos hacen arder en cuerpo y alma cada noche. Adrien y yo compartimos un vínculo y una Compañera, pero yo no estoy dispuesto a que mi gemelo sea el primero en poner sus manos sobre ella. Necesito ser el primero en probar su sabor, en hacerla mía. En cuanto mis ojos se posan en Clara Lobo, mi deseo por marcarla, por tocarla y Emparejarme a ella, hace que mi lado salvaje se desate y mi cordura se convierta en cenizas. No soy capaz de esperar para sentir su alma y su cuerpo enredados con los míos. Adrien: El fuego que siento por Clara es más intenso de lo que jamás lo ha sido en nuestros sueños compartidos, a pesar de que el ardor que sentía por ella ya era de por sí enloquecedor.Su aroma, su presencia, su cuerpo, su rostro, sus ojos,... toda ella es perfecta. Toda ella es tan deseable. Tan irresistible. Y mi Lobo quiere abrir sus fauces y tragársela entera. Verla mirarme con los ojos nublados por el placer y escucharla susurrar mi nombre en un suspiro. Mi capacidad para contenerme y permanecer con la cabeza fría es legendaria entre mis hermanos, pero mucho me temo que, con Clara, soy incapaz de detener el deseo que ruge en mis venas. Por primera vez en mi vida, temo perder el control de ambos lados de mí: humano y Lobo.