C. AUBREY RICE : NIEBLA ALUCINANTE
Sí, sí... Todo ha empezado hace diez minutos escasos. Ha sido como un sueño. Como un sueño raro. Por lo menos, se lo aseguro a ustedes, achacándolo a sueño es como únicamente me explico el motivo -el verdadero motivo- de que mi automóvil esté ahí, empotrado en ese árbol, y yo aquí... ¡Si yo tenía que estar ahora en el dentista, con mi tía Fanny! ¿Que cómo ha sucedido? Pues muy fácil. Verán: hace unos diez minutos, cuando saqué el coche del garaje, cerré la puerta de éste y me volví a aquél, que tenía parado a seis yardas mal contadas. Y entonces fue cuando me encontré con el pobre señor Kuht. Estaba sentado en el estribo.
ACCIÓN INAUDITA
Jane Nickman y Gerald H. Bruce, respectivamente, habían adoptado las personalidades de capitán Yhakotri, de la Segunda División Femenina de la Muerte, y de capitán Sihteku, del
BOLAS BLANCAS DE YEREBLU
Mister Maxwell N. Sirand, el conocido millonario de Boston, dejó sobre la mesa de su despacho las fotografías que con ayuda de una potente lupa había estado observando, y se re
GAN-X
La ventisca barría con furia la desolada blancura helada del Polo. El viento ululaba, la nieve caía y el suelo brillaba con los cegadores reflejos que le arrancaba a trechos el
LA MUERTE FLOTA EN EL VACÍO
Cuando la pantalla del televisor se apagó de improviso, justamente cuando el segundo proyectil se deshizo en el vacío, George Prone, sobresaltado al comprobar que la aguja del
NIEBLA ALUCINANTE
Sí, sí... Todo ha empezado hace diez minutos escasos. Ha sido como un sueño. Como un sueño raro. Por lo menos, se lo aseguro a ustedes, achacándolo a sueño es como únicamente m
PASARON DE LA LUNA
Por la asfaltada carretera que parte en dos el reseco terreno del Desierto Pintado, en los aledaños del Estado de Arizona, un camión de gran tonelaje, con los faros encendidos,
SIN NOTICIAS DE URANO
Las garras de la noche, enguantadas en un negro adusto, sin el menor adorno de destellos verdosos en aquella región, tenían aprisionada a la redonda casita del Valle de las Pla
SITUACIÓN DESESPERADA
Aterradora sensación, aplastante, de lejanía. Calma imponente, helada, inconcebible. Inconmensurable espacio vacío, hueco, carente de todo. Impalpable bloque de nada. Monótona