Jimmy Montone es la estrella del Departamento de Policía de Nueva York desde que capturó a Wendell Sligo, un psicópata que tenía aterrorizada a la población de Estados Unidos. Su excelente reputación lo convierte en la persona ideal para suministrar información a Keyes, un conocido escritor que se ha impuesto la tarea de redactar un libro sobre el crimen, y ayudarle a comprender los procedimientos policiales. Mentor y pupilo encuentran una ocasión propicia para estudiar el tema cuando a Montone le encargan la investigación del supuesto suicidio de un periodista. El detective ofrece a Keyes la posibilidad de seguir la investigación paso a paso, y a partir de ahí nace una estrecha relación de compañerismo entre ellos. Pronto queda claro que el suicidio ha sido un calculado homicidio perpetrado en una persona que ambos conocían, y lo que parecía una amistad desinteresada nacida de la casualidad se revela como una contingencia en la que el azar no ha tenido nada que ver.