Gabe Sullivan pone en riesgo su vida cada día como bombero en San Francisco. Después de haber aprendido una brutal lección acerca de los límites profesionales, sabe que nunca más debe poner en riesgo su corazón con las víctimas de los incendios. Y menos aún con la valiente madre y su pequeña hija a quienes salvó de un mortal incendio en un apartamento… y en las que no puede dejar de pensar. Megan Harris es consciente de que le debe todo al heroico bombero, que ha entrado en un edificio en llamas para salvarla a ella y a su hija de siete años. Todo excepto su corazón. Porque después de haber perdido a su marido, un piloto de la marina, hace cinco años, ha jurado no volver a sufrir por amar —y perder— a un hombre con un trabajo peligroso. Pero cuando Gabe y Megan vuelven a encontrarse, cómo puede hacer él para ignorar el valor, la determinación y la belleza de ella? ¿Y cómo puede ella negar no solo su fuerte vínculo con su hija… sino la forma en que sus ardientes besos la desafían a derribar todo el muro de protección que ha estado construyendo durante tanto tiempo? Si uno -o ambos- se descuidan, podrían acabar enamorándose.