JENS CHRISTIAN GRØNDAHL
A VECES ESTOY CONTENTA, PERO TENGO GANAS DE LLORAR
Cuando Ellinor, a los casi setenta años, vuelve a quedarse viuda, decide que ha llegado el momento de ajustar cuentas. Al menos con Anna, la que fuera su mejor amiga, y con cuy
SILENCIO EN OCTUBRE
Tras dieciocho años de matrimonio, un historiador de arte se despierta una mañana y se encuentra a su mujer en el umbral del dormitorio, con las maletas preparadas y dispuesta